lunes, 5 de septiembre de 2011


Estructuralismo

Dentro de esta teoría, la sociedad se constituye en la medida que tiene determinadas reglas o estructuras que producen el sentido de       los acontecimientos, los cuales son producto de las normas que los hombres han asimilado en sociedad y les permite evocar en común los mismos significados. 

El enfoque estructuralista sostiene que los sentidos engañan, y por lo tanto la comunicación se debe estudiar mediante la construcción de estructuras lógicas, que permitan descubrir las interrelaciones creadoras del sentido y las reglas que constituyen a las normas sociales. También plantea que si la sociedad se constituye porque existen determinadas reglas o estructuras, las cuales producen el sentido de los acontecimientos y las normas externas para juzgarlos, entonces los datos que se presentan ante el observador son en apariencia interpretados de acuerdo con las normas observables en forma directa, pero en realidad esas normas se constituyen o informan, por las reglas operantes en una sociedad determinada a fin de producir tal sentido. 

De esta manera los individuos se encuentran atrapados dentro de estructuras, las cuales sirven como pautas para informar la acción en relación con los datos que reciben. Al interior del sujeto están interiorizadas las reglas productoras de normas, aplicables a cada caso. Dentro de esta corriente la contradicción entre comunicación e información no se plantea como problema. 

Utilizando un método en contraste con los fenomenólogos, los "estructuralistas" tienden a estudiar al ser humano desde fuera, como a cualquier fenómeno natural y no desde dentro, como se estudian los contenidos de conciencia. Con este enfoque, que imita los procedimientos de las ciencias físicas, tratan de elaborar estrategias investigativas capaces de dilucidar las relaciones sistemáticas y constantes que existen en el comportamiento humano, individual y colectivo, y a las que dan el nombre de "estructuras". 

Umberto Eco 

Umberto Eco llega a formulare en su máxima radicalidad —si bien a modo de hipótesis— una interpretación estrictamente sígnica del mundo: "¿Y si el mundo entero y las cosas no fueran más que signos imperfectos de interpretantes externos, del mundo de las ideas? Toda la teoría platónica no es más que una doctrina del signo y de su referente metafísico (...). ¿Y si el mundo fuera el efecto de un designio divino que construye la naturaleza para poder hablar al hombre? (...). El universo es una teofanía: Dios que se manifiesta por signos, que son las cosas, y por medio de éstas nos encamina hacia la salvación".   

El autor mismo discrepa de este modelo sígnico, al menos en la formulación que acabamos de dar, pues "para establecer una metafísica pansemiótica no es necesario que sobreviva el protagonista divino: basta con que predomine un sentido de la unidad del todo, del universo como cuerpo que se significa a sí mismo. Con todo, lo que resulta evidente, a partir de los estudios semióticos de Umberto Eco, es la necesidad de reflexionar filosóficamente sobre cuestiones que rebasan el ámbito lingüístico. El problema del signo, del sentido y de la referencia no es meramente un problema de lenguaje, como lo ven destacados lingüistas actuales, sino que intervienen en la teoría de los signos la lógica, la gnoseología, la psicología, e incluso la metafísica. 



Abraham moles 

1.- Estudia los fenómenos de la comunicación humana, a aportado una metodología original
Los elementos del acto de comunicación son:
Un emisor, un receptor, un canal y el mensaje.
Estímulos materiales o fenómenos de la naturaleza física.
Estímulos Sociales.
La comunicación solo puede ocurrir cuando un emisor y el receptor poseen un lenguaje común.
Repertorio y un código.
Para moles la comunicación puede ser de dos maneras:   

la Comunicación Interpersonal
La Comunicación por Difusión.
Moles define cinco pasos fundamentales que concuerdan con lo que podría llamarse un método estructuralista
1.- El primer paso consiste en delimitar el contexto común entre el emisor y el receptor.
2.- Se pasará después a analizar la naturaleza del contenido de los mensajes
3.- Posteriormente, se determinará cuantitativamente la permanencia de ciertos aspectos en el contenido
4.- Tal Cuantificación se basa en la repetición o redundancia misma
5.- Por ultimo se procura enunciar y esclarecer el conjunto de leyes.
En resumen si el analista esta situado ante un acto comunicativo, este puede adoptar dos actitudes.
1.- Interesarse en las investigaciones del acto comunicativo, en la situación del emisor y el receptor.
2.- Enfocar su atención sobre el objeto material del acto comunicativo: el mensaje 



Roland Barthes 

Ronald Barthes es conocido por el tiempo dedicado al estudio de los signos, la semiología. Esta disciplina, entiende que los seres humanos se comunican no solamente a través de los signos lingüísticos (el lenguaje) sino también de otros elementos culturales tales como la ropa, el peinado, los gestos, las imágenes, las formas y los colores a fin de convencernos unos a otros respecto de las emociones, valores e imágenes que deseamos transmitir.   

Barthes señaló que con frecuencia, cometemos el error de llamar "natural" a lo que consideramos socialmente aceptable, moralmente deseable o estéticamente placentero. Por cierto, es natural comer, dormir, tener relaciones sexuales y usar el lenguaje... sin embargo, qué comemos, cuándo dormimos, cómo tenemos sexo y qué palabras usamos es algo que varía de acuerdo a la cultura o subcultura de la que formemos parte. 

En su ensayo "Le monde ou lon catche", Barthes expone su explicación respecto en lo que ocurre en la mente del lector de ficción o del público del teatro. Su trabajo se basa en el análisis de "Catch" lo que podríamos describir como "luchas guionadas", espectáculo que se diferencia de un deporte genuino porque los contrincantes no compiten "de verdad" y no se esmeran por disimularlo tampoco, esto es, actúan sin hacerse daño con el objeto de reiterar las funciones, noche tres noche. Lo que Barthes puntualiza es que el público, sabe que el combate es fingido. 

Barthes establece una analogía entre el espectador de una lucha de catch y el público de un espectáculo teatral o una novela de ficción. Así como Otelo no asesina "realmente" a Desdémona sobre el teatro (y el público lo sabe, aunque pueda conmoverse), los combatientes de catch no se pegan en "realidad". Sólo se trata de signos que carecen de contenido "real" 

Barthes observa quetodas las formas de comunicación son artificiales pues su funcionamiento se debe a una estructura y la estructura solo puede funcionar en tanto y en cuanto vivamos dentro de una sociedad y no en estado "natural".

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